Vanidad vs Necesidad

Vanidad vs Necesidad


La navidad es una de las fiestas más comercial que existe hoy en día. La gente se preocupa que regalar y que le gustaría recibir. Si lo analizamos, suena como condicional, te regalo, pero a la misma vez espero que me regales. En la temporada navideña podríamos llegar al punto de maldecir. ¿Por qué? Porque quizás no tengas de donde para regalarle a los seres más apreciados. También puede que para otros que tienen dinero en abundancia se convierta en amargura. ¿Por qué?  Numero uno, porque hay personas que no tienen ese deseo de regalar y numero dos porque creen que si utilizan su dinero para regalar se van a defalcar ósea se preocupan por su dinero lo cual les causa amargura. 

Ambos lados de una manera u otra están preocupados y desenfocado de la realidad. La realidad es que ninguno de nosotros necesitamos cosas extras o cosas que quizás nos van a desenfocar de la verdad. De la única manera de enfocarnos en lo que realmente vale la pena en esta vida es cuando podemos disfrutar de la Palabra cuando nos redarguye. Meditemos en los siguientes versículos que nos ayudan a estar bien delante de los ojos de Dios. Agur, un siervo de Dios, clama a Dios de la siguiente manera;

Dos cosas te he demandado;

No me las niegues antes que muera:

Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí;

No me des pobreza ni riquezas;

Manténme del pan necesario;

No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová?

O que siendo pobre, hurte,

Y blasfeme el nombre de mi Dios.

Si verdaderamente creemos que Dios es nuestro proveedor entonces no tendríamos que estar esperando regalos de nadie especialmente si verdaderamente creemos que Dios conoce nuestras necesidades. Desafortunadamente, no entendemos lo que es necesidad, no sabemos ni siquiera cuales son nuestras necesidades, las mezclamos. Creemos que tener Wi-Fi, cable, celular, los últimos electrónicos, carro del último año, lo último de la moda y en abundancia, corte de pelo, etc. es una necesidad. Sin embargo, necesidad es, tener salud y un trabajo. ¿Para qué? Para que podamos tener un techo donde vivir, alimentos, electricidad, y agua.

Enfócate en la realidad y la verdad, Jesucristo. Sed agradecido como dice la palabra, por lo bueno y lo menos bueno y veras que siempre vas a vivir en plenitud y feliz toda tu vida. 

Filipenses 4:19

Y mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.


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